El despido no es siempre la solución o la mejor de las soluciones cuando hay diferencias en la adaptación de un empleado a un puesto de trabajo, o cuando baja su rendimiento.
Son muchas las ocasiones en las que la Dirección de Recursos Humanos debe intervenir para “cortar” un proceso de despido, para reconducirlo y lo hace por las siguientes razones:
- En ocasiones se trata, simplemente, de poca comunicación. Algunos miembros del equipo no comunican bien o suficientemente con el empleado, con lo que acumulan errores y la suma de ellos determina el final de la relación, algo que se podía haber corregido con más comunicación y seguimiento. Es cierto que al principio es una inversión de tiempo e, incluso, de trabajo, pero también es verdad que ese esfuerzo se rentabiliza con el paso del tiempo.
- El talento es escaso, no damos una “patada en el suelo” y salen candidatos para puestos que precisen cierta cualificación, por lo tanto, hemos de hacer un esfuerzo por adaptar al personal que nos llegue, ayudarles a entender lo que somos, lo que precisamos e involucrarlos en nuestros objetivos hasta que se consideren parte del equipo y hagan suyo el futuro de la empresa.
- Medir adecuadamente el trabajo y el rendimiento de las personas que trabajan para la empresa, lo que lleva a detectar, en cualquier momento, un bajón, una crisis, en cualquier empleado, lo que nos conduce, directamente a actuar, a conocer qué puede estar pasando, cómo ayudar, etc. En ocasiones nos podemos encontrar con falta de motivación, con problemas personales o con dificultades en el uso de las herramientas que ponemos a su disposición. En cualquiera de los casos podemos ayudar. No olvidemos que hay que hacerlo con método y periodicidad suficiente.
- Es mucho el coste que la empresa ha afrontado en la formación, en la adaptación del personal, como para tirarlo a la basura con una decisión sin otros planteamientos, por lo tanto, siempre hay que pensar en una segunda solución antes de despedirlo.
Puedo decir, desde esta Dirección de los Recursos Humanos, que hemos intervenido en muchos casos, obteniendo un resultado muy positivo en la mayor parte de ellos, recuperando un talento enorme que se nos iba por la puerta, provocando, además, una enorme motivación en la persona que ha visto que la apuesta de la empresa por su persona, va más allá de salario mensual.
Si me piden un resumen en dos puntos, se lo doy:
- Más y mejor comunicación.
- Medición de datos objetivos del rendimiento de las personas en la empresa.
Espero que les resulte tan útil como a este Departamento le ha sido en el transcurso de tantos años.